El pasado 5 octubre el futbolista y capitán del Real Madrid Dani Carvajal hizo saltar todas las alarmas. Corría el minuto 91 del encuentro en el que los madridistas se estaban imponiendo 2-0 frente al Villarreal, y en una acción sin aparente peligro, Yeremy Pino se cruza con Carvajal quien intenta realizar un despeje, golpeando al aire y la pierna del futbolista, cortando así la trayectoria de la pierna a la altura de la rodilla, la cual podemos observar cómo se dobla hacia dentro.
Horas más tarde se confirman las peores noticias: la lesión del jugador es sumamente grave y tendrá que permanecer mucho tiempo alejado de los terrenos de juego. A la mañana siguiente el Real Madrid emite un comunicado médico con el resultado de todas las pruebas: Rotura del ligamento cruzado anterior (LCA), rotura del ligamento colateral externo (LCE) y rotura del tendón poplíteo en su pierna derecha. En los próximos días se realizará una intervención quirúrgica para que el jugador pueda empezar con su recuperación.
¿En qué consiste la lesión de Carvajal?
Estamos ante una lesión compleja, ya que estamos hablando de una triple rotura. Para ello, vamos a analizar por separado cada una de las roturas para una mayor comprensión global de la lesión del futbolista.
Rotura del Ligamento Cruzado Anterior (LCA)
El ligamento cruzado anterior es uno de los ligamentos principales de la rodilla. Su función es estabilizar la articulación, especialmente durante movimientos de rotación y cambios de dirección rápidos, como los que se realizan constantemente en el fútbol. Este ligamento se sitúa en el centro de la rodilla y conecta el fémur con la tibia.
Esta lesión es una de las más graves y comunes dentro del fútbol, ya que es un deporte en el que se realizan muchos giros de gran intensidad. Al producirse esta rotura la rodilla pierde estabilidad y no puede soportar el deporte de alto rendimiento.
Rotura del Ligamento Cruzado Exterior (LCE)
El ligamento colateral externo (LCE) se encuentra en la parte lateral externa de la rodilla y tiene la función de proporcionar estabilidad lateral. Este ligamento, junto con el colateral interno, impide que la rodilla se desplace hacia los lados en movimientos no naturales, protegiendo la articulación de tensiones excesivas.
Cuando se rompe, el futbolista pierde gran parte del control lateral de la articulación, haciendo que la rodilla se sienta «floja» y vulnerable a nuevos desplazamientos. Es por eso que también se aconseja someterse a una intervención quirúrgica.
Rotura del Tendón Poplíteo
El tendón poplíteo es menos conocido que los ligamentos mencionados, pero juega un papel crucial en la estabilidad de la rodilla, especialmente durante los movimientos de flexión y rotación. El tendón conecta el músculo poplíteo, que se encuentra en la parte posterior de la rodilla, con el hueso tibial, ayudando a desbloquear la rodilla cuando pasamos de una posición totalmente extendida a flexionada.
Una rotura del tendón poplíteo puede ocurrir en lesiones traumáticas combinadas, como aquellas que afectan el LCA y el LCE, y tiene un impacto negativo en la capacidad del futbolista para flexionar y estabilizar su rodilla en movimientos complejos y repetitivos.
¿Cuál es el tiempo de baja estimado para Carvajal?
En estos casos, conviene ser especialmente cauteloso, ya que la recuperación depende de múltiples factores: el éxito de la operación, la fisiología del futbolista, su rehabilitación y proceso de mejora… pero es cierto que el tiempo de baja suele estar en torno a 1 año.
También es cierto que estamos acostumbrados a ver a futbolistas profesionales acortar plazos gracias a su equipo de profesionales, pero el caso de Carvajal puede resultar más complicado, especialmente por la tercera rotura (Tendón Poplíteo) ya que una buena rehabilitación y fisioterapia deportiva es crucial para recuperar la estabilidad y volver al deporte de élite.
¿Cuál será su tratamiento y recuperación?
El primer paso está claro: El jugador será sometido a una operación quirúrgica. A partir de aquí, se abre un periodo de recuperación con unas cuantas fases:
- Fase inicial (4-6 semanas): Control del dolor, la inflamación y la inmovilización de la pierna para permitir la cicatrización.
- Movilidad temprana: Comienzo de ejercicios suaves para recuperar el rango de movimiento sin poner en peligro las reparaciones quirúrgicas.
- Fortalecimiento: Progresión hacia ejercicios de fortalecimiento muscular alrededor de la rodilla, como los cuádriceps y los isquiotibiales, esenciales para estabilizar la articulación.
- Reentrenamiento funcional: Entrenamiento específico para volver al deporte, con un enfoque en la estabilidad, la resistencia y los movimientos dinámicos.
Seguir una buena rehabilitación de rodilla resulta clave para una buena vuelta a los terrenos de juego, que como hemos comentado antes, podría estar en torno a un año. Esto quiere decir que Carvajal podría empezar a ejercitarse con sus compañeros en la siguiente pretemporada, y realizar algunos ejercicios de balón en grupo de forma controlada, pero su vuelta definitiva aún tendría que esperar.
El futbolista cuenta con 32 años de edad, por lo que podrá volver a disputar partidos de fútbol con mucha paciencia y cuidado. Desde Fisioespacio queremos desearle una pronta recuperación y vuelta a los terrenos de juego a Dani Carvajal.